Los síntomas digestivos como el reflujo o la indigestión son unos de los motivos de consulta más frecuentes a nivel mundial.
De hecho, la mayoría de las patologías digestivas comparten síntomas y por ello es tan importante consultar al médico de forma oportuna.
Por esta razón, me di a la tarea de traer todo lo relacionado con la enfermedad por reflujo gastroesofágico, ya que entre 10 a 15% de la población mundial la padece o padecerá en algún momento.
El reflujo gastroesofágico
Por sus siglas ERGE, la enfermedad por reflujo gastroesofágico es una alteración originada como consecuencia de un flujo anormal del contenido del estómago hacia el esófago.
Desde el punto de vista epidemiológico, en la actualidad forma parte de las alteraciones del sistema digestivo más frecuentes, sobre todo en la población occidental.
Entre los contenidos que se regresan a la vía digestiva superior están el ácido gástrico y la bilis, que con el paso del tiempo van provocando síntomas molestos y la aparición de algunas complicaciones.
Cuando los ácidos llegan al esófago
El esófago es una parte del aparato digestivo que tiene como función principal permitir el paso de la comida desde la cavidad bucal hasta el estómago.
Se trata de una estructura muscular y tubular que mide aproximadamente unos 25 centímetros.
Cuando el revestimiento del esófago entra en contacto con los jugos gástricos durante un período de tiempo prolongado, genera irritación en la mucosa, lo que produce los síntomas y las molestias características de esta enfermedad.
Composición de los jugos gástricos
Se trata de un fluido sumamente necesario para el inicio de la digestión de los alimentos. Su composición química se basa en agua, ácido clorhídrico, moco y enzimas.
Una de las enzimas principales es la pepsina que tiene una función proteolítica, es decir, ayudará a degradar el bolo alimenticio.
Causas de la enfermedad por reflujo gastroesofágico

Una vez que los alimentos son ingeridos, una banda muscular de forma circular ubicada en la porción final del esófago se relaja, para permitir el paso del bolo alimenticio al estómago.
A esta banda muscular se le denomina esfínter esofágico inferior y además de dejar pasar la comida impide que el contenido del estómago regrese al esófago.
Por tal motivo, si el esfínter se debilita o no funciona de forma adecuada, aumentan las posibilidades de que el contenido del estómago regrese al esófago, produciendo el reflujo gastroesofágico.
Factores de riesgo para la presentación de ERGE
Esta enfermedad puede afectar a personas de cualquier edad, sin embargo, hay muchos factores de riesgos relacionados con el estilo de vida tales como: comer en grandes cantidades o ingerir muchos cítricos (naranja, limón, etc).
El alcohol y el tabaquismo también se han asociado con un aumento en la presentación del reflujo gastroesofágico, sin embargo, no está del todo claro el mecanismo.
Por otro lado, personas con un índice de masa corporal por encima del límite normal se asocian a un mayor riesgo de ERGE.
Ahora bien, existen factores de riesgo que no son modificables como la hernia hiatal y que solo puede ser corregida quirúrgicamente por un especialista en cirugía general.
Hernia hiatal

La hernia hiatal es una alteración anatómica que se caracteriza por la protrusión del estómago a través del diafragma.
Este último se trata de un músculo que separa la cavidad abdominal de la caja torácica, el cual posee un orificio denominado hiato esofágico, a través del cual transcurre el esófago. Una alteración de este orificio predispone a la formación de una hernia hiatal.
Existen varios tipos, siendo la más común la hernia por deslizamiento, donde la unión gastroesofágica y parte del propio estómago se encuentran ubicados por encima del diafragma.
Una de sus principales complicaciones es que permite que el ácido del estómago e incluso la comida se regresen al esófago, causando los síntomas del reflujo gastroesofágico.
Síntomas de la enfermedad por reflujo gastroesofágico

Las manifestaciones clínicas que pueden presentarse en la ERGE son muy variadas, pero a continuación te mencionamos las más comunes:
Pirosis
La pirosis se define como la sensación de ardor en el estómago y que generalmente se irradia al área retroesternal. Es considerado el síntoma más común de la enfermedad.
Habitualmente, este síntoma aparece a los 30 minutos posterior a la ingesta de comida. Cuando la sensación de ardor es persistente puede convertirse en un dolor muy intenso.
Disfagia
La sensación de que el alimento se detiene a mitad del esófago se denomina disfagia. Esto puede venir dado por una inflamación del esófago (esofagitis) producto de la ERGE.
Este síntoma siempre llama la atención del equipo médico, ya que se puede relacionar con otras alteraciones.
Síntomas extraesofágicos
No se presentan siempre en todos los pacientes, pero es importante tenerlas en cuenta:
Tos crónica: Estimula los centros tusígenos y provoca tos. Suele tener meses de evolución y no parece curarse con nada.
Dolor torácico: Puede tener un carácter quemante o urente. Aunque suele estar relacionado con la ingesta de comida, puede provocar miedo en los pacientes, siendo una de las razones de acudir a urgencias.
Complicaciones de ERGE

La estenosis o estrechamiento del esofago forma parte de las complicaciones más frecuentes de la enfermedad por reflujo gastroesofágico
Una historia prolongada de esta enfermedad sin un tratamiento oportuno se ha relacionado con la predisposición a presentar estenosis.
Por otro lado, el esófago de Barrett se presenta con mayor frecuencia en personas con ERGE.
Esófago de Barrett
Se trata de una metaplasia (presencia de células que no son normales en un tejido) intestinal ubicada en la mucosa inferior del esófago.
A estos pacientes se les recomienda tener un seguimiento adecuado, debido al riesgo de presentar displasia (modificación del tejido que predispone a la aparición de cáncer).
Diagnóstico de la ERGE

El médico especialista se encarga de diagnosticar esta enfermedad haciendo uso de una historia clínica adecuada, con un interrogatorio y examen físico completo.
Cabe destacar que existen pruebas complementarias que pueden utilizarse para confirmar el diagnóstico. Por ejemplo: a través de una endoscopia superior, el médico puede visualizar si existe algún tipo de complicación o inflamación en el esófago.
También está la manometría esofágica que se encarga de hacer medición de las contracciones de las fibras musculares del esófago.
Tratamiento de la enfermedad por reflujo gastroesofágico

El tratamiento de la ERGE depende de las condiciones del paciente y de las características de la enfermedad. Siempre el plan terapéutico será decidido por el médico especialista.
La terapéutica puede ser amplia y venir dada por cambios del estilo de vida junto con antiácidos o inhibidores de la producción de ácido gástrico.
Ahora bien, también se pueden plantear tratamientos quirúrgicos como la funduplicatura de Nissen por laparoscopia realizada por el cirujano general.
Funduplicatura tipo Nissen
Tiene como finalidad tratar la ERGE y posee una efectividad por encima del 90%. Consiste en “reforzar” el esfínter esofágico inferior para evitar que el contenido estomacal regrese al esófago.
Es una intervención que se debe planificar de la mano de un cirujano general con experiencia, para reducir al máximo las posibles complicaciones.
Cirugía anti reflujo a tu alcance
Espero que con este post hayas resuelto muchas de tus inquietudes con respecto a la enfermedad por reflujo gastroesofágico.
Si estás en El Paso, Texas o en Nuevo México y necesitas de una consulta con un especialista en cirugía general estoy para servirte.
De igual forma estaré encantado de solventar cualquier otra duda que tengas.